Dicen que el amor aparece cuando menos te lo esperas, que cuando uno busca y busca no encuentras nada mas que piedras en el camino y es cierto...
Cuando buscas el querer compartir cada amanecer con una persona, el preparar dos tazas de café en lugar de una, en escuchar esa voz por la mañana, terminas ofreciendo todo eso a la persona menos indicada, la primera que se cruza por tu puerta, puede que alguna vez funcione pero cuando ves algo que te gusta en alguien por mas mínimo que sea te agarras con fuerza a ello para que no se escape y asi tener todo lo anterior. Gran error.
Siempre he sido una persona impulsiva y llena de amor que dar pero no me daba cuenta que lo hacia mal, que me dejaba llevar por mi mundo de fantasía y soñaba demasiado despierta. Deje de pensar en ello en decidir dejarme llevar a otro mundo de sensaciones a no ser tan impulsiva, aprender paso a paso y disfrutando del camino y mi camino me llevo al castillo. Si si un castillo con un príncipe y un caballo blanco ( esto último no es cierto, pero quedaba bien). El camino se esta haciendo duro pero disfruto de cada segundo a su lado por poco que sea, vivo un precioso cuento de princesa y se que es solo el principio que aún me queda descubrir mil maravillas que tiene para mi y que compartiremos juntos.
Con lo que vengo a decir es que da igual que te equivoques mil veces, que te caigas otras mil por que siempre te levantaras y el camino seguirá ahí, pero para que disfrutes de las caídas y mas aún de las veces que te pusiste en pie, debes caminar despacio al son del ritmo que te marca tu vida y si en algún momento no disfrutaste repite la experiencia, intenta construirla de nuevo y disfruta de la gente, los colores, la vida, los olores, la música y sobre todo disfruta de ti, por que todo llega tarde o temprano y tenemos que estar conscientes para poder disfrutarlo.
Cuando buscas el querer compartir cada amanecer con una persona, el preparar dos tazas de café en lugar de una, en escuchar esa voz por la mañana, terminas ofreciendo todo eso a la persona menos indicada, la primera que se cruza por tu puerta, puede que alguna vez funcione pero cuando ves algo que te gusta en alguien por mas mínimo que sea te agarras con fuerza a ello para que no se escape y asi tener todo lo anterior. Gran error.
Siempre he sido una persona impulsiva y llena de amor que dar pero no me daba cuenta que lo hacia mal, que me dejaba llevar por mi mundo de fantasía y soñaba demasiado despierta. Deje de pensar en ello en decidir dejarme llevar a otro mundo de sensaciones a no ser tan impulsiva, aprender paso a paso y disfrutando del camino y mi camino me llevo al castillo. Si si un castillo con un príncipe y un caballo blanco ( esto último no es cierto, pero quedaba bien). El camino se esta haciendo duro pero disfruto de cada segundo a su lado por poco que sea, vivo un precioso cuento de princesa y se que es solo el principio que aún me queda descubrir mil maravillas que tiene para mi y que compartiremos juntos.
Con lo que vengo a decir es que da igual que te equivoques mil veces, que te caigas otras mil por que siempre te levantaras y el camino seguirá ahí, pero para que disfrutes de las caídas y mas aún de las veces que te pusiste en pie, debes caminar despacio al son del ritmo que te marca tu vida y si en algún momento no disfrutaste repite la experiencia, intenta construirla de nuevo y disfruta de la gente, los colores, la vida, los olores, la música y sobre todo disfruta de ti, por que todo llega tarde o temprano y tenemos que estar conscientes para poder disfrutarlo.
